El servicio de consulta e información a los consumidores CONSUMOTECA, nos ofrece una serie de consejos elaborados por el Economista y Experto en Derecho del Consumo D. Juan del Real Martín.
Construcciones Cirilo Icod SLU las hace suyas y las ofrece a sus clientes y a cuantos le puedan interesar:
Juan del Real |
"Una chapuza es, en materia de consumo y de reformas en el hogar, cualquier actuación menor de uno mismo, un amigo o conocido con el ánimo de reparar, remozar o adecentar cualquier estancia o servicio del mismo: un enchufe, una mano de pintura, un grifo que gotea, etc.
Hay muchas razones para no contratar a un chapuzas a la hora de hacer reformas, pero si lo haces, ten en cuenta esto, por favor:
1.-Los chapuzas son pseudo-profesionales de las reformas que pueden tener experiencia pero no una formación técnica. Por tanto, si la reforma que vas a emprender es compleja puede que la cosa no termine bien.
2.-Desconfía de los profesionales que dicen saber de todo, y no se amedrentan por ninguna reforma (albañilería, electricidad, instalaciones de agua, gas y pintura).
Ten en cuenta que un profesional lo es de su especialidad, para la cual disponen de formación profesional y de una titulación específica, además de una acreditación oficial que les habilita para hacer reformas (título de instalador autorizado y Certificado de profesional habilitado).
3.-Para que te den de alta en un contrato de suministro, las compañías (electricidad, gas, etc.) exigen, porque así lo exige la ley, que la instalación haya sido visada y prepara por un profesional con su “Certificado de profesional habilitado”, así que si te hace la instalación un chapuzas sin certificado, no disfrutarás del servicio.
4.-Es tu derecho solicitar una hoja informativa con los precios aplicables por tiempo de trabajo, los gastos de desplazamiento y el coste de otros servicios ofertados. Al contratar a un chapuzas, no dispondrás de estas garantías, con lo cual, si las cosas se tuercen..
5.-Los chapuzas tampoco pueden entregarte un presupuesto previo por escrito como manda la ley, con lo cual, la reforma se te puede ir de las manos sin problema.
6.-La norma obliga a los profesionales de las reformas a mostrarte y acreditar el precio de los materiales empleados en la reforma, y nunca te podrán cobrar más que el coste de estos. Los chapuzas te pueden cobrar lo que quieran.
7.-Los chapuzas carecen de licencia fiscal para trabajar con lo cual están haciendo competencia desleal a sus colegas profesionales además de defraudar al fisco.
8.-Piensa en tu responsabilidad en caso de que la reforma se tuerza o esté mal hecha. Por ejemplo, una instalación de agua caliente sanitaria que a los pocos días provoca humedades en tu piso o en el de tus vecinos.
Al no disponer de una póliza de responsabilidad civil que cubra su actuación, en caso de accidente o desperfecto, los chapuzas no se podrán hacer cargo de los gastos que se deriven de los mismos.
9.-No olvides que para hacer una reforma en casa es posible que tengas que solicitar y pagar el tributo asociado, una licencia de obras menores a tu Ayuntamiento. Si no dispones de ella, y el chapuzas desde luego no te la tramitará, la Policía Municipal te puede dar problemas en caso de que un vecino se queje dando parte.
10.-Los chapuzas no dejan rastro de su paso por tu hogar (más que el de la reforma, según como quede de bien, regular o mal hecha) así que no hay forma de localizarlos o de exigirles después."
Hay muchas razones para no contratar a un chapuzas a la hora de hacer reformas, pero si lo haces, ten en cuenta esto, por favor:
1.-Los chapuzas son pseudo-profesionales de las reformas que pueden tener experiencia pero no una formación técnica. Por tanto, si la reforma que vas a emprender es compleja puede que la cosa no termine bien.
2.-Desconfía de los profesionales que dicen saber de todo, y no se amedrentan por ninguna reforma (albañilería, electricidad, instalaciones de agua, gas y pintura).
Ten en cuenta que un profesional lo es de su especialidad, para la cual disponen de formación profesional y de una titulación específica, además de una acreditación oficial que les habilita para hacer reformas (título de instalador autorizado y Certificado de profesional habilitado).
3.-Para que te den de alta en un contrato de suministro, las compañías (electricidad, gas, etc.) exigen, porque así lo exige la ley, que la instalación haya sido visada y prepara por un profesional con su “Certificado de profesional habilitado”, así que si te hace la instalación un chapuzas sin certificado, no disfrutarás del servicio.
4.-Es tu derecho solicitar una hoja informativa con los precios aplicables por tiempo de trabajo, los gastos de desplazamiento y el coste de otros servicios ofertados. Al contratar a un chapuzas, no dispondrás de estas garantías, con lo cual, si las cosas se tuercen..
5.-Los chapuzas tampoco pueden entregarte un presupuesto previo por escrito como manda la ley, con lo cual, la reforma se te puede ir de las manos sin problema.
6.-La norma obliga a los profesionales de las reformas a mostrarte y acreditar el precio de los materiales empleados en la reforma, y nunca te podrán cobrar más que el coste de estos. Los chapuzas te pueden cobrar lo que quieran.
7.-Los chapuzas carecen de licencia fiscal para trabajar con lo cual están haciendo competencia desleal a sus colegas profesionales además de defraudar al fisco.
8.-Piensa en tu responsabilidad en caso de que la reforma se tuerza o esté mal hecha. Por ejemplo, una instalación de agua caliente sanitaria que a los pocos días provoca humedades en tu piso o en el de tus vecinos.
Al no disponer de una póliza de responsabilidad civil que cubra su actuación, en caso de accidente o desperfecto, los chapuzas no se podrán hacer cargo de los gastos que se deriven de los mismos.
9.-No olvides que para hacer una reforma en casa es posible que tengas que solicitar y pagar el tributo asociado, una licencia de obras menores a tu Ayuntamiento. Si no dispones de ella, y el chapuzas desde luego no te la tramitará, la Policía Municipal te puede dar problemas en caso de que un vecino se queje dando parte.
10.-Los chapuzas no dejan rastro de su paso por tu hogar (más que el de la reforma, según como quede de bien, regular o mal hecha) así que no hay forma de localizarlos o de exigirles después."
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